Los Yariguíes fueron un pueblo indígena que habitó una vasta región selvática del Magdalena Medio, en la zona occidental del actual departamento de Santander, en Colombia.
Este pueblo se caracterizaba por su cultura agrícola y su habilidad en la elaboración de objetos de cerámica y de tejidos de algodón.
Los Yariguíes se dividían en varias tribus o cacicazgos, y su territorio abarcaba una gran extensión de la región andina colombiana. Sin embargo, su cultura y su modo de vida se vieron seriamente amenazados por la llegada de los conquistadores españoles en el siglo XVI, lo que provocó un declive demográfico y cultural de este pueblo indígena.
Actualmente, aunque no existen comunidades que se autodenominen como Yariguíes, se pueden encontrar algunos descendientes de este pueblo indígena en diferentes regiones de Colombia.
La tribu Yariguíes no existe como tal en la actualidad, pero todavía hay personas que se identifican como descendientes de esta tribu y mantienen algunas de sus tradiciones y costumbres.
Sin embargo, debido a la asimilación cultural y la mezcla con otras etnias, es difícil determinar con precisión quiénes son los descendientes directos de los Yariguíes en Colombia.
Hoy en día, en las regiones de Santander y Norte de Santander, donde antes habitaban los Yariguíes, hay comunidades indígenas que luchan por preservar sus tradiciones y mantener vivas sus culturas, entre las cuales se encuentran los U’wa, los Bari, los Sikuani, los Guane y los Yariguí.
Quienes fueron Pipatón y Yarima
Pipatón y Yarima son personajes legendarios dentro de la cultura de la tribu Yariguíes, un pueblo indígena que habitó la región de Santander en Colombia.
Según la leyenda, Pipatón era un guerrero valiente y astuto que lideraba a los Yariguíes en su lucha contra los invasores españoles que llegaron a la región en el siglo XVI. Se decía que Pipatón era capaz de moverse con gran rapidez y que era experto en el uso de la lanza y el arco y flecha. A pesar de su valentía, Pipatón murió en batalla, luchando por la defensa de su pueblo y sus tierras.
Por otro lado, Yarima era una mujer guerrera de gran belleza y valentía. Se decía que era una líder natural que inspiraba a su pueblo a luchar contra los invasores españoles. Además de ser una experta en el uso del arco y flecha, Yarima era conocida por su habilidad en la curación y por su profunda conexión con la naturaleza. Según la leyenda, Yarima también murió en la lucha contra los españoles, defendiendo a su pueblo y sus tradiciones.
Ambos personajes son considerados héroes en la cultura de la tribu Yariguíes y son recordados como símbolos de la resistencia y la lucha por la libertad y la justicia.
Los descendientes de los Yariguíes
Aunque estas comunidades no son descendientes directas de los Yariguíes, comparten algunos rasgos culturales y territorios similares.
La palabra «Yariguíes» se refiere originalmente a la tribu indígena que habitó en la región de Santander, Colombia, antes de la llegada de los conquistadores españoles.
Los Yariguíes se destacaron por su habilidad en la agricultura y por la elaboración de tejidos y cestería.
Actualmente, la palabra «Yariguíes» también se utiliza para referirse al Parque Nacional Natural Serranía de los Yariguíes, una importante área protegida de Colombia que lleva el nombre de esta tribu indígena.
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