Luego de que el presidente Gustavo Petro reconoció la imposibilidad de continuar la idea del metro subterráneo en su totalidad propuso basado en un estudio de la Sociedad Colombiana de Ingenieros un punto intermedio completamente viable técnicamente.
Según el gobierno luego de estudiar con los mejores expertos nacionales y extranjeros para evaluar proyectos sobre el metro de Bogotá, la propuesta sería un metro mixto, una parte elevada la que ya se está haciendo, y subterranizar desde la estación Antonio Nariño hasta la calle 72
Para los defensores de esta nueva oferta conciliadora que presenta el gobierno nacional, el posible atraso en tiempo, no tienen ningún tipo de comparación con el beneficio que recibirá la ciudad en los próximos 30 años (como lo dice el estudio de la Sociedad Colombiana de Ingenieros).
“Presentamos una nueva alternativa de metro mixto, en donde se vuelve subterráneo. Tendría 2 estaciones más” Presidente de la República @petrogustavo en alocución
— RTVC Noticias (@RTVCnoticias) March 18, 2024
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Los costos (económicos, ambientales, urbanísticos, de movilidad, en tiempo para usuarios) de mantener el metro elevado por la Caracas lo padecerá Bogotá durante los próximos 100 años.
Aquí caben las siguientes preguntas
¿Por qué el fundamentalismo con el metro elevado? ¿Por qué negarse a hacer un acuerdo con el gobierno nacional y unos contratistas, los chinos, que están dispuestos a acordar?
¿Carlos Fernando Galán alcalde de Bogotá cae en la miopía del gobernante promedio en Colombia?
A la nueva propuesta del gobierno Petro, Carlos Fernando Galán dice lo siguiente:
Es “jurídicamente imposible” modificar el contrato del Metro con el consorcio chino
Galán aseguró que la modificación que propone el presidente Petro es “jurídicamente imposible y técnicamente inviable”.
“No es posible cambiar un contrato firmado y ejecución, somos respetuosos de la ley y de la constitución y vamos a cumplir el contrato. La ciudad ya ha hecho inversiones por 2.9 millones de pesos y si el proyecto de cambia buena parte de los recursos se perderían” indicó el alcalde.
Explicó que si Distrito se acogía la propuesta del presidente Petro se perderían millonarios avances en la compra de predios por la Avenida Caracas y en el traslado de redes.
“Se perderían los valores pagados en la Avenida Caracas por la compra de predios y el traslado de redes que asciende a 542 mil millones densos, esos recursos irían a la caneca. No estamos hablando del costo a futuro, son inversiones que ya se hicieron en territorio en compra de predios, la opinión pública debe saber que eso se perdería y que esos recursos se necesitan en las ciudades”, indicó el alcalde Galán.
Galán responde de manera inexacta y confusa
En la respuesta de Galán hay varias afirmaciones inexactas o que tiende a confundir y a justificar una decisión que oculta aparentemente las verdaderas razones.
El contrato si se puede modificar, los predios adquiridos no se perderían y la supesta perdida de tiempo no se compensa con el daño que va a recibir la ciudad
Los medios de comunicación tradicionales y la oposición duraron días diciendo que el gobierno nacional no acepta a los técnicos, pero cuando aparecen conceptos meramente técnicos como los de la SCI y en la mayor de las experticias, y les dice que el metro elevado en la Caracas hará perder un 77% de tiempo de viaje comparado con la solución mixta que lo subterraniza desde la estación Antonio Nariño, entonces ahí si no la aceptan.
Cabe recordar los 135 mil millones de pesos de los ciudadanos, que echó a la basura Enrique Peñaloza.
El Metro subterráneo iba hasta la calle 127; hoy gracias al proyecto de Peñalosa, Claudia López y que ahora defiende a muerte Carlos Fernando Galán va hasta la 72 así pierda la ciudad, como ya perdió 8 billones la sociedad bogotana por suspender el proyecto original del metro subterráneo.
Construir sobre lo construido
Los que tanto hablan de construir sobre lo construido fueron los que echaron para atrás el metro subterráneo (con tramos elevados) generando retroceso y detrimento para Bogotá (8 billones perdidos) con Peñalosa y Claudia López.
Hoy en el gobierno de la ciudad, ahora en manos de Galán, dicen que hacerlo mixto es imposible, cuando lo único que se les plantea es reajustar, no volver a empezar, reajustar para ahorrar billones y para ahorra hasta un 77% en los tiempos de viaje a los usuarios.
La nación aporta el 70% de los recursos del Metro, así que mandar al presidente Gustavo Petro a “meterse en sus asuntos” es un disparate.
Hay que defender el mejor Metro posible para Bogotá, no para intereses particulares. Construir sobre lo construido es reajustar y optimizar recursos, impactos en el paisaje urbano y en la vida de las personas, no solo en el uso del Metro sino en su construcción.
Todavía se puede, que interés oculto pueden tener los que hoy defienden en Bogotá el alimentador de Transmilenios con la consigna “Frente al Metro de Bogotá, ¡ni un paso atrás!
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