Los 8 concejales de Barrancabermeja que debían presentarse a una audiencia en la Procuraduría Provincial de esta ciudad el pasado miércoles 9 de julio, se vieron obligados a aplazar la cita para este viernes 11, debido a que la concejal Kelly Ortiz Calao, (una de las investigadas por la anticipada elección de Juntas Directivas del Concejo 2.014 y 2.015), adujo una ‘incapacidad médica’ que le impedía presentarse personalmente en el Ministerio Público.
Kelly Ortiz, experta en técnicas de aplazamiento.
Algunos analistas políticos en el puerto petrolero, (que solicitaron reserva de sus nombres), advirtieron a BARRANCABERMEJA VIRTUAL que la doctora Kelly, concejal experta en técnicas de aplazamiento y otros menesteres no santos, ha acudido a la clásica fórmula de la excusa médica para torpedear la acción de la Procuraduría para realizar la audiencia, en una hábil demostración de aplicación a la ya usual fórmula de ‘Jurisprudencia de la Gabeta’, que consiste, ni más ni menos, que en ir aplazando, de manera constante y permanente, todo tipo de diligencias disciplinarias, administrativas y penales que buscan un objetivo que no es otro que el de «archivar» las investigaciones y pasar de agache la acción de los organismos de control.
Procuradora en el ojo del huracán.
A partir de este momento, todas las miradas quedan enfocadas directamente en la Procuradora Provincial de Barrancabermeja, Carmen Ibañez Elam, funcionaria que en las próximas horas deberá pronunciarse sobre las actuaciones de 8 concejales del municipio de Barrancabermeja que en el año 2.013, participaron en la elección de Mesas Directivas del Concejo Municipal con 2 ex concejales (Erwin Jiménez y Luz Ena Cortés) que, públicamente, les habían declarado la pérdida de investidura a través del Consejo de Estado y que no tuvieron reparo en participar en decisiones que hoy son cuestionadas por las autoridades.
De momento, analistas políticos en el puerto petrolero dicen que la Procuradora Provincial de Barrancabermeja, Carmen Ibañez Elam, debe evitar la llamada ‘Jurisprudencia de la Gabeta’ que significa «archivar con sumo cuidado los procesos, para lograr que el olvido haga el resto».
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