
La trayectoria del periodista Daniel Coronell, otrora símbolo de rigor y ética en el periodismo colombiano, parece haber entrado en una preocupante decadencia.
En su más reciente intento por desacreditar la reforma a la salud promovida por el gobierno nacional, Coronell ha dirigido sus ataques hacia la doctora Beatriz Gómez Consuegra, esposa del ministro Guillermo Jaramillo.
Gómez Consuegra, reconocida por su impecable trayectoria y su incansable vocación de servicio, ha sido objeto de rumores infundados sobre un supuesto maltrato al personal de la superintendencia.
Este ataque, más allá de su aparente objetivo, parece ser una estrategia para golpear indirectamente al ministro Jaramillo y, de paso, defender los intereses de las EPS corruptas que se verían afectadas por la reforma a la salud que propone el gobierno.
Le puede interesar: El ocaso periodístico de Daniel Coronell
La propuesta del gobierno busca eliminar la intermediación financiera que ha permitido a estas entidades lucrarse a costa de la salud de los colombianos, un cambio que claramente incomoda a quienes han mantenido el control del sistema por años.
Coronell, quien alguna vez fue un defensor de la verdad y la justicia, ahora parece haberse convertido en un peón al servicio de las EPS corruptas, utilizando su plataforma para perpetuar narrativas que favorecen sus intereses.
Este giro en su carrera no solo pone en duda su credibilidad, sino que también evidencia cómo algunos sectores del periodismo pueden ser utilizados como herramientas para proteger estructuras de poder que perjudican al bienestar colectivo.
Respuesta del ministro Guillermo Jaramillo al ataque de Daniel Coronell a su esposa Beatriz Gómez Consuegra
Desde el momento en que fui designado como Ministro de Salud y Protección Social, los ataques contra mi esposa, la doctora Beatriz Gómez Consuegra, no han cesado.
Quienes la señalan omiten —deliberadamente— que su nombramiento fue realizado en septiembre de 2022 por el entonces superintendente Ulahi Beltrán, mucho antes de mi designación como Ministro.
Una vez me fue ofrecido el cargo por el señor Presidente Petro, actué con total transparencia y solicité un concepto a Función Pública para que evaluara cualquier posible inhabilidad.
La entidad, que es la competente para hacerlo, concluyó que no existe ninguna inhabilidad, pues no hay relación jerárquica entre nuestras funciones ni facultad o posibilidad de nominarnos mutuamente.
Es profundamente indignante que, a pesar de esta claridad jurídica, los ataques persistan, y más grave aún, que se realicen con un sesgo evidentemente machista.
Pretenden reducir a mi esposa a una figura secundaria, ignorando su formación, experiencia y la dedicación con la que ha trabajado por la salud de los colombianos y colombianas.
Le puede interesar: A Coronell #LaFacturaRefundida le salió chimba
Este tipo de agresiones no solo buscan deslegitimarla como profesional, sino que refuerzan una cultura que aún persiste en nuestro país: una en la que el mérito de una mujer es cuestionado solo por ser pareja de un hombre que ostenta un cargo de poder.
La doctora Beatriz Gómez Consuegra es una funcionaria pública íntegra, que cuenta con una trayectoria intachable y una vocación de servicio incansable.
No permitiremos que se siga usando su nombre como herramienta para ataques políticos que nada tienen que ver con su labor ni con la verdad.
Rechazo con firmeza estos ataques y defiendo el liderazgo de las mujeres en el sector público, no solo como un deber institucional, sino con una convicción personal.