El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) planea ajustar sus recomendaciones de máscaras para aconsejar a las personas vacunadas contra COVID-19 que vuelvan a usar mascarillas en interiores en ciertas situaciones.
El cambio en la guía se produce después de que los casos de COVID-19 aumentaron en Estados Unidos, casi triplicándose en las últimas dos semanas a medida que la variante delta arrasa el país.
Se han difundido más informes de casos entre personas completamente vacunadas a medida que la variante altamente transmisible se convirtió en la cepa dominante en los EE. UU.
La guía más restrictiva de la máscara marca una reversión del movimiento de la CDC para aflojar las recomendaciones de la máscara en mayo.
La agencia había advertido que las personas completamente vacunadas podían ir sin máscara en la mayoría de los entornos interiores y exteriores, mientras que las personas no vacunadas todavía tenían instrucciones de cubrirse la cara.
Los críticos denunciaron las recomendaciones atenuadas de la CDC para el enmascaramiento, calificándolo de prematuro y argumentando que sin la verificación del estado de vacuna de las personas, el público dependería de un sistema de honor.
La directora de la CDC, Rochelle Walensky, citó en ese momento las bajas tasas de infección entre las personas vacunadas y la eficacia de la vacuna como razonamiento para la decisión.
Pero eso fue antes de que la variante delta más transmisible se apoderara de la mayor parte de los EE. UU., Que ahora representa una gran cantidad de infecciones.
Los funcionarios de la administración de Biden habían discutido posibles actualizaciones de la guía en los últimos días y estaban en contacto con funcionarios de la Casa Blanca sobre posibles cambios a medida que los casos empeoraban y la situación parecía volverse más problemática.
Sin embargo, la Casa Blanca se ha remitido repetidamente a expertos médicos para cualquier decisión final, en un esfuerzo por evitar politizar la orientación de salud pública.
Los funcionarios de salud pública han dicho que las vacunas son efectivas contra la variante delta, pero las infecciones de avance indican que la cepa podría potencialmente sortear la vacuna más que las cepas anteriores.
Aún así, los funcionarios federales han dicho que el 97 por ciento de las personas hospitalizadas con COVID-19 no están vacunadas.
La semana pasada, Walensky dijo a los periodistas que no había planes para ajustar la orientación de la agencia, y agregó que «siempre estamos mirando los datos a medida que llegan».
«Si se encuentra en un área que tiene una alta tasa de casos y bajas tasas de vacunación donde los casos delta están aumentando, ciertamente debería usar una máscara si no está vacunado», dijo Walensky, y señaló que las personas vacunadas podrían elegir si se usan o no la máscara. .
Leana Wen, médica de emergencias y profesora de salud pública en la Universidad George Washington, dijo en un tuit que el plan informado de los CDC para restringir su guía de mascarillas para personas completamente vacunadas era una buena noticia.
«Espero que los CDC publiquen un mensaje contundente que diga que todos deben usar enmascaramiento en interiores a menos que haya una prueba de vacunación (es decir, vacunados alrededor de vacunados = no se necesitan máscaras, pero de lo contrario no se puede confiar en el sistema de honor)», dijo.
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