Un denuncio penal instaurado por el periodista Diego Waldrón, en la Fiscalía General de la Nación, el 24 de marzo de 2.011 ante el despacho de la entonces Fiscal, Vivianne Morales Hoyos, por los presuntos delitos de concierto para delinquir (parapolítica) y enriquecimiento ilícito habría sido el motivo de la inesperada salida del recién posesionado Secretario Departamental del Interior, Alfonso Eljach Manrique.
La información que, originalmente publicó el periódico Vanguardia Liberal de la ciudad de Bucaramanga en su edición digital del domingo 20 de octubre (VER AQUI …), fue posteriormente confirmada por el propio afectado, Eljach Manrique, quien en un lacónico mensaje a sus amigos manifestó que «en la campaña a la Alcaldía del año 2.007 pretendieron decir que un joven que aparece en una fotografía era un jefe paramilitar, situación que denuncié ante la Fiscalía. Hoy, nuevamente pretenden enlodar mi nombre con una nueva denuncia del año 2.011 que no supera ‘ser una denuncia’ por carecer de verdad». Más adelante Eljach Manrique afirma enfáticamente «mi hoja de vida está llena de reconocimientos, rectitud y honestidad».
Según el abogado Alfonso Eljach, la fotografía en la que él aparece junto a un paramilitar y al hoy alcalde de Barrancabermeja, Elkin Bueno Altahona, corresponde a la de un «utilero» que estaba al servicio de la campaña política del médico Álvaro Aguilar quien para el año 2.007 aspiraba al Concejo de Barrancabermeja y no a la de José Alirio Zafra, alias Cote o alias Don Antonio como aparece registrado en el denuncio penal.
La noticia de la salida del abogado Alfonso Eljach de la Secretaría del Interior en la Gobernación de Santander ha generado diversas reacciones, muchas de ellas diametralmente opuestas.
El ex aspirante al Concejo Municipal de Barrancabermeja, Luís Fernando Calderón, uno de los dirigentes políticos más allegados a Eljach Manrique manifestó que «todo se trata de una infamia que pretende enlodar la imagen de un hombre decente que le ha servido incondicionalmente a la ciudad y la región». Para Calderón, «finalmente Eljach Manrique demostrará su inocencia».
Sin embargo, otra cosa muy diferente piensa el abogado, Alfredo Castaño Martínez, quien advirtió que «aún no se ha podido desactivar la célebre denuncia formulada por Diego Waldrón a pesar de la inmensa cantidad de dinero y contratos con los que pretendieron silenciar a este comunicador a quien seguramente le quedará difícil retractarse porque sus denuncios son delitos perseguibles de oficio por la Fiscalía y al arrepentirse estaría incurriendo en el delito de calumnia y falsas imputaciones ante la autoridad competente».
Frente a los extraordinarios hechos que han sacudido en Barrancabermeja la actividad política en los últimos días, sus habitantes viven a esta hora un ambiente tenso a la espera del desarrollo de los acontecimientos.