El ingeniero, Germán Grajales Quintero, Secretario General Técnico de INVIAS, manifestó que «de continuar la huegla decretada por los trabajadores del proyecto Gran Vía Yuma, las entidades que están a cargo del proyecto se verán obligadas a suspender definitivamente la construcción de la mega autopista porque no hay recursos dentro del presupuesto de la obra para complacer las exigencias de los huelguistas».
La Gran Vía Yuma es uno de los proyectos más importantes en materia vial para la región y busca unir los departamentos de Antioquia, Norte de Santander y Santander bajo el mismo propósito: abrirle paso a la transversal occidental de Colombia, que comunicará al golfo de Maracaibo (Venezuela) con el futuro Puerto de Tribugá sobre el Océano Pacífico. Además unirá la principal vía de Colombia, la Trocal del Magdalena, con la principal arteria fluvial, el río Magdalena.
El proyecto que posesionaría a Barrancabermeja como “centro industrial y empresarial”, que proyecta generar 500 empleos directos e indirectos y más de 100 negocios con empresas de la región, no atraviesa un buen momento.
Las entidades que integran el convenio Via Yuma, (Alcaldía de Barrancabermeja, Gobernación de Santander, Ecopetrol y el Invías) afirmaron que por la huelga se tomaría la decisión de no continuar la construcción del corredor vial.
“El proyecto Gran Vía Yuma respeta el derecho a la libre asociación sindical, pero invita a actuar bajo los lineamientos de la ley que rigen el trabajo de las empresas y los trabajadores”, exhortaron los socios del proyecto.
Las declaraciones de los directivos del consorcio se dieron debido a la suspensión de la obra por cuenta de la huelga que se adelanta sobre la ciénaga Palotal, (que hace parte del sector 3 del proyecto), en inmediaciones del puente Guillermo Gaviria o de Yondó.
¿Que dicen los huelguistas?
El presidente de Sintrayuma, Alexander Vanegas Leguizamón, (Sindicato de los Trabajadores de la Gran Vía Yuma) recientemente creado, aseguran que «están cansados de trabajar al sol, que el contratista no les ha cumplido con el pago de una serie de bonificaciones prometidas desde febrero y que están dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias, si no se incrementa en un 50% el valor del salario que les cancelan cada mes ($ 600.000)».
Algunos trabajadores que no están de acuerdo con las peticiones de Sintrayuma comentan que «el cese de actividades los perjudica, pues algunos esperaron hasta dos años para conseguir un empleo, distinto al que ofrecen las empresas contratistas que trabajan con Ecopetrol en obras como la ampliación de la refinería».
Los trabajadores huelgistas cuentan con la asesoría de la Unión Sindical Obrera, USO. Mientras tanto el consorcio proveniente de Bogotá, así como Ecopetrol y la Cámara de Comercio estudian los costos adicionales que este cese de actividades le traerá al proyecto.
Se plantean muchos interrigantes.
— ¿Cuál es el futuro para esta obra, cuyo costo total podría alcanzar los $ 300 mil millones de pesos?
— ¿Qué significa para la región que esta obra no se lleve a cabo?
“No es una obra de Ecopetrol”, dicen funcionarios del proyecto.
Para el Gestor Técnico del Proyecto de la Gran Vía Yuma, Mario Rueda, «el problema radica en que se piensa que la obra es financiada en su totalidad por Ecopetrol, lo cual no es cierto».
“Este es un proyecto que funciona bajo los lineamientos del Ministerio de Transporte y de INVIAS, en el que se determinó el pago de un salario mínimo legal vigente, como lo establece el Código Sustantivo del Trabajo”, advirtió el funcionario.
Así mismo, este profesional asegura que fueron las entidades que participan en el proyecto las que decidieron que Ecopetrol, a través de su estructura de contratación, se encargara de buscar el personal por medio de la plataforma del Servicio Nacional de Aprendizaje, SENA.
Declaraciones polémicas.
Para el doctor, Mario Rueda, Gestor Técnico del Proyecto Gran Vía Yuma, “el barranqueño tiene que cambiar su mentalidad, no se puede pensar que solo de petróleo se vive en esta ciudad, sino que debemos reactivar el intercambio comercial, para que Barranca se expanda y pueda crecer como lo han hecho ciudades como Bucaramanga o Bogotá”, dijo.
Los trabajadores responden.
Para los trabajadores lo fundamental es que se le pague bien a los obreros y que se respete la mano de obra barranqueña. “Exigimos igualdad salarial, porque traen personal de otras ciudades y les brindan mejores condiciones, les pagan vacaciones, viáticos. Les dan mejores condiciones a los de afuera y a nosotros los barranqueños nos pagan un salario mínimo y de paso mensual”, manifestaron los huelgistas.
Edwin Palma Egea, presidente USO Barrancabermeja y quien ha apoyado a los trabajadores de Sintrayuma advirtió que “hay una discriminación, despiden trabajadores sin justa causa. Existe una violación abierta y sistemática de los derechos de reunión y asociación de los trabajadores de este proyecto”.
“Hay una serie de inconvenientes laborales. La entrega no oportuna de la dotación, el pago oportuno de salarios, entrega de los recibos de pago y los contratos de trabajo. Son cosas que podemos revisar en el escenario del diálogo”, justificó el líder sindical.
Sintrayuma advirtió que no ha sido llamado a diálogos y que el martes realizarán una marcha por las principales vías de Barrancabermeja.
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