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Jorge Bastidas abre debate sobre el rol y la imparcialidad de los Medios de Comunicación

El llamado del congresista Jorge Bastidas abre una puerta a un debate necesario sobre la ética, la transparencia y el futuro del periodismo en la era de la información digital y la polarización política.

En un movimiento que ha encendido las redes sociales y promete avivar una discusión largamente postergada en el país, el congresista del Pacto Histórico, Jorge Bastidas
debate sobre el rol y la imparcialidad de los Medios de Comunicación

En un movimiento que ha encendido las redes sociales y promete avivar una discusión largamente postergada en el país, el congresista del Pacto Histórico, Jorge Bastidas, publicó un extenso y provocador mensaje en su cuenta de la red social X (anteriormente Twitter). 

En su hilo, Bastidas no solo cuestiona la actual dinámica de los medios de comunicación en Colombia, sino que también plantea la urgente necesidad de un «debate democrático» sobre su papel en la sociedad.

El mensaje del congresista surge en una semana particularmente sensible para el periodismo nacional, marcada por la retractación de reconocidos periodistas como Juan Diego Alvira y Néstor Morales ante las exigencias de Mafe Carrascal y Martha Peralta, y la retirada de una entrevista «cuestionable» por parte de Eva Rey

Estos eventos, según Bastidas, subrayan la pertinencia de su inquietud: «

¿El país necesita un debate democrático a los medios? 

¿Los medios son intocables?».

De informadores a actores políticos: Una transformación en cuestión

Bastidas inicia su análisis con una reflexión sobre la evolución del periodismo. Antaño, los medios masivos eran los «garantes de la información«, la fuente primordial para entender el acontecer nacional. 

Sin embargo, el congresista argumenta que hoy muchos han «priorizado el hacer opinión y hasta ser actores políticos«, desdibujando la línea entre informar y opinar.

El congresista, quien aclara no ser experto en el tema y presenta sus reflexiones desde el «sentido común«, enfatiza la diferencia fundamental entre información y opinión. Mientras la información es «verificable, evidente, sustantiva, inequívoca«, la opinión es «subjetiva, calificativa, interpretativa y puede ser variable«. Ambas, reconoce, deben ser libres en una sociedad democrática.

Bastidas evoca una «mística por informar» que, según él, caracterizaba a los medios del pasado, devotos de la veracidad y la primicia. 

Aunque reconoce que aún existen medios que mantienen esta esencia, lamenta el auge del periodismo de opinión que, en su visión, ha llevado a una dilución de esa delgada línea. 

Como ejemplo, menciona el «comentario editorial» de Juan Gossaín en Radio Sucesos RCN, donde la opinión se advertía explícitamente, un «gesto respetuoso con la audiencia» que denotaba «pudor por no mezclar las dos cosas».

La imparcialidad en entredicho y la pérdida de la verdad

La imparcialidad, que antes fungía como un «principio periodístico» y una demostración de veracidad –citando el cubrimiento de la BBC en la Guerra de las Malvinas como caso paradigmático–, parece haber perdido relevancia para «numerosos medios» en la actualidad. 

Bastidas critica cómo muchos periodistas hoy «perdieron el pudor y muestran las noticias de acuerdo a su sesgo político«, disfrazando opiniones como noticias.

El congresista no escatima en ejemplos. Señala cómo medios «editorializan las noticias mientras las leen o publican«, llevando a que la audiencia asuma estas opiniones «con empaque de noticia» como información verídica. 

Menciona el caso de Camila Carvajal en Blu Radio, quien, al leer una noticia, manifestó su opinión sobre el Ministro Jaramillo sin presentar las «dos caras de la moneda«. Aunque reconoce el derecho de Carvajal a opinar, subraya que, en el periodismo informativo, se deben presentar todas las perspectivas.

Un punto crucial en su crítica es la supuesta «pérdida de la verdad» en muchos medios. 

Bastidas se refiere a la narrativa ampliamente difundida sobre un estudio del Banco de la República que supuestamente indicaba la pérdida de 450 mil empleos por la Reforma Laboral. El congresista, citando a Hanwen Zhang, expone que este estudio era parcial y no representaba la postura oficial del Banco. 

La pregunta de Bastidas es contundente: 

«¿Por qué ningún medio se sentó a hacer este análisis del estudio y tragaron entero? 

¿Por qué cuando una doctora en estadística… descubre que se había creado una falsa narrativa ¿ningún medio corrigió y explicó? 

Porque la verdad dejó de ser importante.»

Similarmente, Bastidas cuestiona la insistencia de los medios en afirmar que el sistema de salud está mal por falta de financiación a las EPS, cuando, según el ingeniero Vicente Calvo, la UPC (Unidad de Pago por Capitación) es suficiente

«Este hallazgo no ha sido refutado pero ningún medio se ha sentado a revisar este estudio, todos siguen haciendo eco de una mentira repetida mil veces,» sentencia.

Conflictos de intereses y medios como «bando político«

El congresista también aborda la problemática de la propiedad de los medios y los conflictos de intereses no declarados. Cita el caso de RCN Noticias, propiedad del grupo Ardila Lule (dueño de Postobón), defendiendo las gaseosas frente a un impuesto a las bebidas azucaradas sin «declarar antes a la audiencia su conflicto de interés«.

Bastidas lamenta que muchos medios «deciden qué es noticia y qué no lo es» respondiendo a «intereses políticos o económicos«. 

Critica que medios como SEMANA, con un claro «sesgo político«, no lo hagan público y «dejen de posar de medio imparcial«. Advierte que esta tendencia convierte a los medios en «un bando político más que difunde su narrativa, con el agravante de que tienen un gran poder de amplificación«.

Propuestas para un periodismo renovado

Concluyendo su análisis, Bastidas propone seis puntos para un periodismo más transparente y equilibrado:

Diferenciación de espacios: Los medios deberían separar claramente los espacios de información de los de opinión y advertirlo a la audiencia.

Declaración de conflictos de intereses: Todo medio o periodista debe hacer explícitos sus conflictos de intereses antes de opinar.

Derecho a la réplica: Promover el derecho a la réplica en los espacios de opinión para evitar una «tiranía mediática».

Ley de tercios:Impulsar que un tercio de los medios sean públicos, otro privado y otro comunitario, con apoyo estatal para estos últimos.

Transparencia en medios regionales: Los pequeños medios regionales y municipales deberían hacer públicos sus contratos con alcaldías y gobernaciones.

Claridad ideológica: Los medios que asumen una postura ideológica deben tener claro que, al hacerlo, «están renunciando a ser garantes de la información».

Bastidas finaliza su mensaje reconociendo la existencia de «periodistas éticos» y «medios que hacen un gran periodismo de investigación», como Cambio, WRadio, Vorágine, La Nueva Prensa, Cuestión Pública, Tercer Canal, Raya y Noticias Uno. 

Sin embargo, insiste en que su análisis busca «mostrar una realidad que se va imponiendo» en la mayor parte del panorama mediático colombiano.

El llamado del congresista Jorge Bastidas abre una puerta a un debate necesario sobre la ética, la transparencia y el futuro del periodismo en la era de la información digital y la polarización política.

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