Esta reciente fotografía de Barrancabermeja muestra el gran contraste que se palpa en el puerto petrolero en donde, por un lado, se observa el pujante desarrollo urbanístico que viene impulsando el sector privado en la ciudad, mientras que, paradójicamente, también se puede apreciar el pésimo estado de la malla vial, con calles totalmente destartalas y llenas de huecos, ( una responsabilidad que le compete a la Alcaldía Municipal).
DESPUÉS DE 1 AÑO, ILUSIÓN TOTALMENTE PERDIDA.
Nunca antes en la historia de Barrancabermeja un gobernante había logrado tantas coyunturas a su favor como las que logró, hace 1 año, el hoy alcalde del puerto petrolero, Elkin Bueno Altahona.
Con el respaldo en las urnas de casi 50 mil ciudadanos, con unas claras mayorías en el Concejo Municipal, con facultades continúas y de manera plena durante los 4 años de su mandato, con un presupuesto anual de 500 mil millones de pesos (280 millones de dólares), con una inversión pujante por parte del sector privado, con el respaldo del gobernador de Santander Richard Aguilar, el apoyo logístico de Ecopetrol (la primera empresa nacional) y el total respaldo de los medios de comunicación que siempre le sirve de caja de resonancia a su gobierno, Bueno Altahona vivía su mejor «luna de miel».
Ningún alcalde en Colombia se dió el lujo de poseer las ventajas que tuvo en su primer año de gobierno el alcalde Elkin Bueno.
Sin embargo, hoy la realidad es otra y bien amarga. Las cosas no han andado de la forma que gran parte de la comunidad soñaba y esperaba.
Problemas como la contaminación, la invasión del espacio público, el deterioro de las vías, los problemas de movilidad, la informalidad en el transporte, el desempleo, la exclusión de la mano de obra local, las basuras y la celda transitoria, el daño a las ciénagas y cuerpos de agua, las demoras en el alimento y transporte escolar, la mala atención brindada al adulto mayor, las deficiencias en la infraestructura educativa, los problemas de seguridad ciudadana, por solo mencionar algunos inconvenientes que han marcado la vida de los barranqueños en estos meses bajo la deficiente gestión del alcalde municipal Elkin Bueno Altahona, que a pesar de grandes anuncios en su campaña y de tener la experiencia de haber ocupado en 2 oportunidades el primer cargo de la localidad ha sido completamente incapaz de al menos enfrentar estos problemas y ha provocado el efecto contrario profundizando problemas e incrementando las necesidades de la comunidad.
ALCALDE Y SECRETARIO DEL MEDIO AMBIENTE IBAN A COMETER UN ACTO DE TERRORISMO AMBIENTAL.
La apatía de la administración municipal ha marcado este año donde la capacidad de asombro y de indignación se ve desbordada por las llamadas «alcaldadas» del primer burgomaestre y su gabinete.
Los ejemplos abundan, el tema de las basuras fue una de esas «perlas», pues el alcalde, con la complicidad del secretario del Medio Ambiente iba a recibir los desechos de varios municipios del departamento de Santander en un acto de terrorismo ambiental con Barrancabermeja.
Además hay que sumar todo el problema de lixiviados que terminan por llegar a la ciénaga San Silvestre y que la Alcaldía niega en un ejercicio de ceguera voluntaria.
EN EL TEMA DE LA SEGURIDAD CIUDADANA, SECRETARIO DE GOBIERNO TAMBIÉN «SE RAJÓ».
En el tema de seguridad, donde la Administración Municipal, junto con la fuerza pública, han anunciado a todo pulmón que en esta ciudad «no pasa nada», que los indicadores de orden publico cada día son más favorables, que Barrancabermeja es «un remanso de paz», mientras la Defensoría del Pueblo emite un informe de riesgo que rápidamente se convirtió en alerta temprana, a pesar de la molestia manifiesta del alcalde Elkin Bueno y su secretario de Gobierno, Juan de Dios Castilla.
El informe del Defensor del Pueblo señaló la real y preocupante situación de seguridad de Barrancabermeja donde el hurto, las amenazas, la extorsión y los homicidios selectivos acechan a todos los barranqueños sin distingos de edad o condición social.
EN EL PÉSIMO BALANCE DE LA ALCALDÍA NO SE SALVÓ NI SIQUIERA LA MANO DE OBRA BARRANQUEÑA.
El último lamentable ejemplo fue hace solo unos pocos días en donde el burgomaestre defendió la mano de obra extranjera, y no se refería a personas de otras regiones del país. El alcalde Elkin Bueno apoyó a trabajadores de diferentes nacionalidades que vinieron a trabajar en la refinería de Barrancabermeja desplazando a barranqueños muy capaces profesionalmente.
Sin mayor rubor el alcalde Bueno Altahona defendió la participación de extranjeros en la refinería sin siquiera indagar, al menos superficialmente, sobre lo que hablaba.
Los maltratados obreros barranqueños tuvieron que pasar el trago amargo que la primera autoridad del municipio, Elkin Bueno, no salió en defensa de sus coterráneos.
Este ejemplo de los trabajadores mejicanos en la refinería de Barrancabermeja, que puede resultar anecdótico y marginal, representa lo mal que le ha ido a la ciudad en este 2012, año para el olvido, donde no se ha visto ni desarrollo ni iniciativa pública, y más bien la economía local ha visto una desaceleración.
De otro lado, socialmente problemas como la extorsión, las amenazas, el microtrafico de drogas y los asesinatos selectivos siguen siendo la sombra que persigue a todos los ciudadanos.
GOBERNADOR DE SANTANDER, RICHARD AGUILAR, EN UN 1 AÑO SÓLO APORTÓ UNOS MERCADITOS.
Lamentablemente si en el municipio de Barrancabermeja llueve, en el departamento de Santander no escampa.
El gobernador Richard Aguilar comenzó con grandes anuncios y una intensa retorica, pero hasta el momento no se le ha visto nada, es mas ha provocado muchos problemas como en el caso de la atención al adulto mayor donde no se han dado las soluciones que esa población espera urgentemente en el puerto petrolero.
El discurso, (es decir sólo la retórica del bla bla bla), es lo que ha predominado en la relación del gobernador Aguilar con Barrancabermeja, sin darle paso a la acción, pues a pesar de los anuncios mediáticos y del impulso inicial que se le veía de manera aparente, no ha hecho absolutamente nada. En Barrancabermeja no ha iniciado ninguna obra y de la entrega de unos mercados y misceláneos no se ha pasado, para la preocupación de todos.
BUENO ALTAHONA NO TIENE PRETEXTO PUES HA SIDO ALCALDE EN 2 OPORTUNIDADES.
Es cierto que estos gobiernos apenas empiezan y que muchos problemas de esta ciudad son el fruto de años de desidia e incapacidad administrativa, pero también es un hecho que para el caso de la alcaldía de Barrancabermeja, el titular de este cargo cuenta con la experiencia necesaria para asumir la responsabilidad sin problemas pero lamentablemente hasta el momento su incapacidad de hacerlo es realmente preocupante, y el tiempo pasa en contra de la ciudad y sus habitantes y el alcalde Bueno Altahona no parece darse cuenta.
Habrá que esperar que el 2013 traiga cambios y buenas cosas para los pobladores de esta tierra.
