Duros reclamos al frente de la Alcaldía contra las autoridades encargadas de salvaguardar el orden en la ciudad de Barrancabermeja se han dejado sentir en las últimas horas por parte de la comunidad luego de la escalada violenta que ha venido sacudiendo al puerto petrolero. ‘La gota que rebosó la copa’ fue el asesinato del joven Jhon Jairo Amador de la Rosa, un moto taxista de profesión, quien fue hallado muerto en una zona boscosa en la vereda Tenerife (corregimiento El Centro), lo que generó, el pasado jueves 24 de mayo, una concentración de protesta en inmediaciones del Palacio Municipal, sede gobierno del alcalde, Elkin Bueno Altahona.
Como rechazo al fallecimiento del joven John Jairo Amador de la Rosa, su familia con el apoyo de las organizaciones de Derechos Humanos, se trasladó con el ataúd del joven a las instalaciones de la Fiscalía y de la Alcaldía Municipal de Barrancabermeja, ya que los familiares del occiso denuncian falta de compromiso de dichas instituciones, pues la primera, (es decir la Fiscalia), no recepcionó la denuncia de los padres para activar el mecanismo de búsqueda, y la segunda (la Alcaldia Municipal) por no velar la seguridad de los barranqueños.
La inusual marcha de protesta se llevó a cabo el pasado jueves 24 de mayo a las 2:30 de la tarde, luego de que velaran el cuerpo en la Funeraria e Inversiones La Paz y antes de darle cristiana sepultura en el Cementerio Municipal.
«Estamos marchando con el cuerpo de mi hijo hacia la Fiscalía y la Alcaldía, para que los entes gubernamentales se den cuenta de la irresponsabilidad que hay en Barrancabermeja, que yo como padre de la víctima, cuando necesité el apoyo para ir a buscar a mi hijo, que quizás lo hubiéramos rescatado con vida, pero no me lo prestaron», indicó Jairo Amador, padre del joven de 19 años asesinado.