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Nota Editorial de Gabriel Galvis Molina ya debe estar en manos de la Fiscalía.

banderaPor: Luís Manuel Carrero Gómez.

La actual campaña política en la ciudad de Barrancabermeja ha entrado en un proceso histórico de rectificaciones por parte de algunos de sus máximos dirigentes. Autocritica y Crítica empieza a hacer parte de la actual campaña política. ¿Quién lo creyera?  No es un dirigente de la izquierda tradicional de nuestra ciudad el que hace este pronunciamiento político. No, no es así. Ellos ahora son ejemplo de clientelismo, como continuación de la corruptocracia por otros medios. ¿Cuándo saldrán del closet?

¿Hasta cuándo seguirán opinando de sofismas de distracción?
¿Cuándo los que se han hecho ricos de la noche a la mañana rendirán cuentas?
¿Cuándo nos mostrarán sus hojitas de vida?
 
Los marxistas de marzo y la derecha de la izquierda de Barrancabermeja (los clientelistas), hace rato se olvidaron de este método y técnica que posibilita direccionar lo mejor posible un proyecto político y modelo de gobierno.
 
La autocrítica y crítica permite cualificar la estrategia y táctica política, para avanzar hacia el poder y el gobierno.
 
Para los libres pensadores y humanistas es de la esencia de la democracia, en la construcción de un verdadero Estado Social y Democrático de Derecho. Nuestra ciudad ya hace parte de ese proceso.
 
La autocrítica y crítica, como actitud existencialista en el pensamiento y acción, es inherente en todos aquellos que de manera individual y colectiva dirigen ciertos procesos. La ética política es uno de sus fundamentos.
 
Esas contradicciones históricas que han venido sucediendo en nuestro ciudad, alrededor de ciertos dirigentes y la misma conducta de sus militantes, en la forma de direccionar la política y el gobierno, es lo que ha permitido al dirigente conservador Gabriel Galvis Molina entrar en ese proceso dialéctico.
 
Gabriel Galvis Molina ha sorprendido en estos días, en el periódico regional El Barranqueño, con un editorial de prensa titulado: «Elkin tiene mucho que explicar». Editorial que, a propósito, le dio la vuelta al mundo y leían Los Indignados de Francia.
 
Ese editorial comienza con una frase visionaria desde el punto de vista de la práxis política : «LOS BARRANQUEÑOS AL IGUAL QUE MUCHOS COLOMBIANOS OLVIDAN SU PASADO Y QUIEN OLVIDA SU PASADO ESTA CONDENADO A VOLVERLO A REPETIR».
 
Quien no supiera que Gabriel Galvis Molina es un dirigente conservador diría que esa frase salió de un marxista de marzo de Barranca.
 
A grandes rasgos este dirigente conservador, conocedor de primera mano de la política en nuestra ciudad, nos hace a través de una reflexión auto crítica, lo que puede estar ocurriendo en la bella hija de Yarima y Pipatón. Antes y ahora.
 
Este editorial, que ya debe estar en las manos de la Fiscalía General de la Nación, entre otros organismos de control, es de trascendental importancia. Allí asoma presuntas conductas delincuenciales por parte de Elkin David Bueno Altahona, entre otros, como aspirante nuevamente a la Alcaldía Municipal de nuestra ciudad.
 
Galvis Molina advierte y, él sabrá por qué lo afirma, cuando nos dice: «Me duele aún de aquella época tener que recordar el craso error, el cual pagué con el Documento de Claridades bajo el gobierno de Elkin Bueno, en el que diría yo pagaron justos por pecadores, aún ahí tenemos tela por cortar (…) ».
 
Mi pregunta: ¿A qué se referiría Gabriel Galvis Molina cuando manifiesta que aún hay tela por cortar? ¿Serán muchos metros? … No lo sabemos.
 
Termina este dirigente conservador implorándole a la justicia hacer justicia. En otros términos, investigar para investigar y no para no investigar.
 
Nos dice: «En deuda se halla la justicia con Barrancabermeja. Ya es hora de enmendar la indolencia y actuar prontamente fallando estas investigaciones que se convierten en sofismas de distracción, con personajes que a sabiendas que tienen cúmulos de procesos jurídicos por fallar engañan con aspiraciones para gobernar la administración pública (…)».
 
Deberán ser las autoridades respectivas, en el marco del debido proceso y de la presunción de inocencia, quienes se encarguen oficiosamente y a través de denuncia penal respectiva, aclarar estos hechos que enturbian el actual proceso electoral.
 
Las afirmaciones hechas por Gabriel Galvis Molina son graves de gravedad absoluta. Que no le quepa a nadie la menor duda.
 
Sin duda que estas elecciones es una de las más trascendentales en nuestra ciudad, de ahí la preocupación autocrítica de Gabriel Galvis Molina.
 
En días pasados, departiendo con este dirigente conservador en nuestra ciudad, me comentaba su preocupación acerca de la suerte de la ciudad.
 
Barrancabermeja no se puede volver a equivocar manifestaba. Por eso no me extraña la actitud actual de él.
 
Gabriel Galvis Molina, en esta autocrítica, valiente por cierto, desea enviar un mensaje a las actuales generaciones y las venideras, de que no todo vale, que hay que hacer política y no politiquería, que el presupuesto es sagrado, que el municipio debe estar al servicio de los barranqueños, que no nos podemos equivocar esta vez.
 
A propósito de autocríticas y críticas recuerdo al dirigente conservador Álvaro Gómez Hurtado cuando en ese proceso de rectificaciones, de denuncias, hablaba de que había que tumbar el régimen. Hablaba, obviamente, de la corruptocracia.
 
Nuestra ciudad requiere urgentemente de parte de sus dirigentes y de la ciudadanía, entrar en ese proceso de búsqueda de la verdad histórica de cómo es que se ha venido ejerciendo la política y sobre todo de permitir que las autoridades respectivas hagan justicia, como lo reclama Galvis Molina.
 
Sería importante en estos últimos días de campaña política que los principales aspirantes entren a reflexionar ante su militancia y ciudadanía en general, acerca de que se ha hecho mal y bien en el ejercicio de la política municipal a través de sus propios partidos y movimientos para poder así hacer de nuestra ciudad un verdadero ejemplo de Laboratorio de Paz.
 
Seguridad Ciudadadana, Desarrollo Socioeconómico Equitable, Justicia Trasicional y Respeto al Medio Ambiente, hacen parte de esa agenda.
 
En Colombia está haciendo falta, entre otros mecanismos, la aplicación del ‘Polígrafo’ para que las campañas sean más transparentes.
 
¿Será eso posible algún día?
 
Desde Barrancabermeja — Lyon (Francia), un barranqueño más que viene acompañando la campaña a la Alcaldía Municipal de Darío Echeverri Serrano.
 
¡Allá estaremos presentes el día de la victoria!
 
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NOTA: Las opiniones publicadas aquí son de exclusiva responsabilidad de su respectivo autor y no responden al pensamiento o punto de vista de Barrancabermeja Virtual.

LUIS MANUEL CARRERO GOMEZ es un abogado penalista barranqueño, radicado actualmente en la ciudad de Lyon (Francia) pero con contacto permanente con la realidad de su tierra amada ‘Barrancabermeja’. Su correo electrónico es: luismanuel121@hotmail.com

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