Por: Félix Jaimes Lasprilla.
¡Insólito! … No recuerdo proyecto vial alguno en el departamento de Santander sobre el que se haya conversado y analizado tanto, en tan poco tiempo y sobre el que haya tanta coincidencia entre técnicos, políticos, gremios y gobernantes regionales, como el de la necesidad de tener una carretera estable entre Bucaramanga y Barrancabermeja. Para la clase dirigente santandereana la importancia de esta vía es incontrovertible. Y no hay documento alguno, que yo conozca, que al tratar sobre el desarrollo futuro de Santander no ubique en primer lugar la necesidad de garantizar una rápida y segura comunicación vial entre Bucaramanga, la Troncal del Magdalena y Barrancabermeja.
Todos los estudios, todos los líderes regionales y en general toda la comunidad coincide en que el eje Bucaramanga – Barrancabermeja es clave para Santander y el nororiente del país, entre otras razones, porque Barrancabermeja cuenta con la infraestructura petrolera más importante de la empresa más importante de Colombia y en la mitad del mencionado eje quedará la hidroeléctrica más grande del oriente colombiano. Por lo expuesto y lo ocurrido el pasado diciembre, cuando se movieron 12 kilómetros de la vía Bucaramanga – Barranca, es que se han celebrado cientos de reuniones, escrito miles de artículos y enviado decenas de cartas explicando, demostrando y solicitando al gobierno central que aborde la solución definitiva a esta sentida necesidad. A la fecha podemos afirmar que si bien es cierto se atendió lo urgente, dar vía, no se ha hecho absolutamente nada por lograr lo importante y definitivo: diseñar y construir 20 kilómetros de vía por fuera de los coluviones.
Lo insólito es que después de tanta rogadera para que se contrate el diseño de este tramo, de espaldas a nuestras verdaderas necesidades, dentro del primer paquete de concursos de méritos convocados por Invías este año y sin nadie pedirlo, lo que apareció fue la convocatoria a los «Diseños Fase III de la vía Bucaramanga – Alto el Escorial», por $ 9.400 millones, ignorando que éstos estudios fueron realizados por Eta Ltda. en 1995 y que además la Evaluación Económica de ese proyecto, realizado por tres importantes empresas consultoras, concluyó que éste era inviable.
Ante el contraste expuesto y después de leer una insubstancial respuesta, firmada por un Subdirector (e), a una solicitud que formuló la Cámara de Comercio al Director del Invías para que contrate el diseño del tramo por fuera de los coluviones, creo que la copa se llenó y lo que urge es organizarnos para marchar en Bucaramanga y Barrancabermeja, a ver si nos paran bolas.
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El doctor Félix Jaimes Lasprilla, es actualmente el director de la Unidad de Negocios de Inversión y Desarrollo Regional de la Cámara de Comercio de Bucaramanga.
