Por: Marco Aurelio Cadena Ch.
Son cientos, a veces miles los trabajadores que día a día van y vienen por la vía principal a la Refinería, en lo que se conoce como o Avenida del Ferrocarril; ellos pasan raudos frente a esta mole de metal, simbolizando a la imagen de un Cristo que mira al cielo extendiendo sus brazos y manos en dirección al infinito; ubicada sobre el borde de la Ciénaga Miramar, tan acostumbrados a verla que le prestan mínima importancia, cosa que no ocurre con muchos turistas y visitantes que, por el contrario, llegan hasta el malecón con el ánimo de saber quién, cómo y por qué se instaló esta imagen de metal sobre los humedales de esta agua, que en verano suele cubrirse de la planta conocida como jacinto de agua o tarulla.