La firma SCF Marine, subsidiaria de Seacor Holdings, comenzó operaciones en el río Magdalena a través de su participación mayoritaria en la compañía Naviera Central, empresa que ofrece servicios de transporte fluvial y portuarios, con más de 10 años en las hidrovías del país, principalmente usando embarcaciones de bajo calado. Según se ha podido establecer el primer convoy transportó seis barcazas con 3.850 toneladas de maíz, sorgo y rollos de acero, que se embarcaron en Cartagena y Barranquilla, fueron descargadas en Puerto Berrío (Antioquia) y tuvieron como destinos finales Medellín y Bogotá.
«Consideramos a Colombia como un país de oportunidades con necesidades crecientes de transporte para productos de grandes volúmenes como granos, carbón, combustibles, y materiales de construcción», afirmó Tim Power, presidente de SCF Marine Inc.
Con la más reciente importación de maquinaria, la flota de Naviera incluye seis barcazas Mississippi tipo tolva con cubiertas, dos barcazas multipropósito, cuatro barcazas tanque de 10.000 barriles, tres remolcadores de bajo calado y tres semiconvoyes de 70 toneladas de capacidad cada uno.
Otro gigante que le apostará al río es la firma Impala, con una inversión de 27 millones de dólares, a través de Trafigura (la segunda comercializadora de petróleo más grande del mundo). La multinacional se prepara para poner a funcionar una flota compuesta por 19 barcazas y un remolcador, cuya capacidad de transporte es de 47.000 toneladas métricas.
La idea es mover 9.000 toneladas de carbón térmico río arriba, entre el puerto de Barrancabermeja y Barranquilla, dice Alejandro Costa, gerente de Impala Colombia. En convoyes de seis barcazas saldrá el mineral que llegue de las minas de Cundinamarca y Boyacá.
Este nuevo servicio fluvial atenderá a Boyacá, Cundinamarca, Antioquia y Santander, incluyendo las áreas metropolitanas de Bogotá, Medellín y Bucaramanga.
En su reciente viaje a China, el presidente, Juan Manuel Santos, participó como testigo de honor en la firma de un nuevo Memorando de entendimiento entre Cormagdalena e Hydrochina, donde se dejan sentadas las bases para identificar mecanismos y recursos necesarios para el inicio de inversiones dirigidas al aprovechamiento del río Magdalena.
